LA ERA DEL PLÁSTICO
A partir de los 60, el plástico invadió, de manera masiva, todos nuestros objetos cotidianos, ya en el hogar, en el colegio o en la calle. De repente, casi todo pasó a fabricarse con este material, definido como el material de la vida moderna, práctico y al alcance de todos los bolsillos y capaz de adaptarse a todos los diseños.
Algunos de mis primeros juguetes aún fueron de hojalata pero, rápidamente, el plástico acabó con los materiales más tradicionales. El nuevo material, incluso, se introduciría en algunos de los objetos representativos de la fiesta fallera; no sabría decir, con exactitud, pero los petardos de tro de bac, durante un tiempo, se fabricaron de plástico y se vendían como “el futuro de la pirotecnia”; no explotaban muy bien y la salida de las piedrecitas del interior de la carcasa de plástico era bastante incontrolada. No se que pasó con este tipo de petardo pero todo el mundo se quejaba, por lo que deduzco que, en este caso, el plástico no se adaptó, todo lo bien que se imaginaba, a la fabricación de estos petardos.
Aunque ya estábamos casi en los 70, las banderitas españolas y señeras con las que, las fallas más pudientes obsequiaban al vecindario, el día de la replegà, seguían siendo de tela y de papel, en el resto. El cachirulero de mi calle completaba sus ingresos confeccionando esas banderitas que he mencionado, las hacia con papel cebolla de colores, pegadas a mano una a una y yo me quedaba maravillado de cómo era capaz de hacerlo tan exacto y tan rápido. El papel cebolla es bastante resistente pero, normalmente, las banderitas acababan rotas debido al aire tan fuerte que suele soplar durante las fallas, por lo que, en poco tiempo, fueron sustituidas por las de plástico
Durante este largo periodo de tiempo el plástico fue sinónimo de modernidad, sobretodo en los años 80 donde se revalorizó todo el material de carácter sintético: ir vestido con acetato o con plástico era estar preparado para el futuro, pero su uso demostró lo que ya se intuía: el plástico no es un material fácil de llevar porque no respeta nuestras necesidades naturales de transpiración. Además, el plástico y sus derivados son un material que nacieron con muchas expectativas y que el tiempo ha puesto en su lugar, al principio, fué muy fácil sustituir los materiales mas tradicionales por los nuevos pero, en los últimos tiempos, se ha demostrado que es un material contaminante: por todos es sabido su lenta degradación.
Uno de los discos que mejor representó, para mí, ese espíritu de modernidad sintética fue el de un nuevo grupo que, allá por los últimos meses del 79, invadió las listas de éxitos, se llamaba Buggles y la canción Video kill the radio star (machacada, desgraciadamente, por las actuales radios remember) y su videoclip fue el primero que emitió la MTV; un auténtico bombazo!!. Siempre he sido más aficionado a la compra de LP’s que de singles y dejándome llevar por mis gustos me decidí por la compra del disco grande y, durante mucho tiempo, sirvió de banda sonora a mi deseada modernidad. Me gustaban todos sus temas, era un tecno-pop, con matices de guitarras acústicas y eléctricas, que imprimía a las canciones un toque más popero, aunque se utilizaran muchos nuevos efectos sintéticos. Los títulos de las canciones recogían todos los tópicos del futurismo: los robots, el monorraíl, la dinamo, el espacio y, por supuesto, el plástico; de hecho, el titulo del disco era The Age of Plastic (la era del plástico) y había una canción que se llamaba Living in the Plastic Age (viviendo en la era del plástico), que era, y es, una de las que mas me gustaba. Tenía una portada de lo más pop-futurista utilizando tipografía digital en el título, con un retrato de hombre-conectado (Trevor Horn en la portada y, en la contraportada, Geoff Downes, en versión vinilo), simulando el efecto rayado de las 625 líneas de la televisión.
Quien le iba a decir a Regino Más, cuando empezó a utilizar un nuevo material químico (poliestireno expandido) para decoraciones, hacia principios de los 60, según relata Perez Contel en su libro “El ninot de Falla”, que, cuarenta años más tarde, se estaría viviendo la era del plástico en la construcción de fallas. Vivimos tiempos de polémica con la utilización de este nuevo? material, que si la contaminación, el humo, la perdida de tradición, mucha preocupación por los residuos tóxicos liberados a la atmósfera durante la cremá, pero aún no he oído a nadie que se preocupe por los que trabajan el “pantex”, los gases y el polvillo que genera su manipulación no deben ser nada buenos para la salud, por lo que creo que se hace necesaria una investigación seria.
Regino Mas
La necesidad de ser creativo me hace usar este material pero mi deseo seria trabajar, cada vez más, con materiales que respeten a los que los manipulan y a su entorno. La originalidad tan demandada durante años se ha conseguido, parcialmente, con la utilización del corcho blanco y, tal como se plantea esta profesión, en este momento y ateniéndose a las demandas del mercado existente, es difícil compaginar construcción creativa de fallas con la no utilización del corcho.
Como he hablado de futuro y modernidad, me gustaría pensar que, las nuevas generaciones, podrán trabajar con más respeto por el medioambiente con materiales más saludables y dejar de vivir en la era del plástico fallero.
Los Buggles sacaron otro disco, que no tuvo casi éxito, y uno de sus componentes, Trevorn Horn, se convirtió en un destacado productor discográfico trabajando con gente como ABC, Pet Shop Boys, Seal o Belle & Sebastián.
Siempre conservaré en mi colección de vinilos, como un tesoro, The Age of Plastic.